Grité por tu nombre. Al despertar de un bello sueño, grité en la soledad por tú nombre y me sentí desolado porque no estabas tú a mi lado. Solo tengo el incondicional recuerdo de ese amor tan eterno y tan profundo vivido con mucha ternura y pasión. De mi silencio y de mi garganta dolida grité tú nombre con todas mis fuerzas con la esperanza que me escucharías. Solo son emociones guardadas en mi mente que se atrofia con el tiempo. Todo lo bello que he pasado contigo, solo era una ilusión. Desde el fondo de mi alma, grité por tú nombre, se alumbró tú presencia envuelta en seda de amor enseñando toda tú belleza, donde mi corazón se encandiló de tanta emoción. ¡Solo era el despertar de un bello sueño!.

Eres como una rosa. Pudo ser en Mayo como en junio, cuando aquella bella flor de mi rosal se despertó y en mi pecho adornó. De sus pétalos se abrió toda su dulzura, porque era la rosa de los ensueños, y de su hermosura me fasciné, en sus pétalos la besé. Esta bella rosa que en su tallo silvestre creció e yo de su belleza me enamoré. Que bonita parecía en la caída de la noche y por el brillo del rocío que desprendía, una lagrima se me escapó y en sus pétalos se quedó, como prueba de amor hacía a la rosa que he soñado. ¡Hay! Mi rosa adorada, de mi corazón te arrancaron, porque ya no había rosa hermosa, no es porque no te amaba, es que alguien te llevó, como una bonita flor perfumada, y mi corazón sufrió por no poder tenerte cerca de mi, a la rosa que tanto he amado.

Una Lágrima. Lloros del alma, corazón desolado, pensamientos de dolor, envueltos en poesía de amor. Lágrimas que por el rostro te encaminas, piérdete en mi cuerpo dolido. Encuentra tu destino o empápate en mi cuerpo sufrido. Mis ojos brillan como un rayo de luz, una lágrima que se me escapa y se desliza  por mi cuerpo temeroso, de ahí percibo una fragancia de olor a flores, mezclados con muchos sentimientos de amor. Las lágrimas que se caen por mi rostro son el reflejo de la pasión que siento por ti, y se manifiestan en el interior de mi corazón. La verdadera lágrima no es la que cae de los ojos, ni la que resbala por la cara; Sino la que duele en el corazón y resbala por el alma…

Déjate llevar. Déjate llevar, por el sosiego de las aguas, el zumbido del viento, el susurro dulce de una voz amiga que te quiere. Todo lo que escuchas; te seduce, te llena de ternura, te invita a la contemplación, a vivir desde tu interior con mucho amor y pasión. ¡Que hermosa es la vida, cuando en tu corazón palpita, por un ideal, una razón, un sueño, o una ilusión! Déjate llevar por la frescura del aire puro de tus pulmones, el susurro de dulces palabras, y por las deliciosas manos que te acarician... Vive pendiente de tus emociones, déjate llevar por lo que dice tu corazón, allí tienes tu tesoro, lo encontrarás cuando bucees por ese mar hermoso hacía a lo mas profundo de tu interior, descubrirás el secreto de tus verdaderas pasiones. Déjate llevar por instinto de tus sensaciones en tu corazón está el destino de tu decisiones y en ello el camino de tus ilusiones. Sólo así encontrarás el esplendor del frescor de tu inocencia bañada de lindas palabras de amor y pasión.